"La primavera pasada fue la más calurosa de toda la historia, la temperatura media de junio repitió el récord marcado en 2012 y en julio resultó ser la más alta de toda la historia de observaciones instrumentales", señaló.
Un calor anómalo registrado en la región rusa del extremo norte causó la muerte masiva de renos en la península de Yamal (noroeste de Siberia) a causa del ántrax.
Científicos creen que el calor hizo que se descongelara el cadáver de un animal enfermo que permanecía enterrado en el permafrost —capas del suelo que están permanentemente congeladas— desde hace al menos 75 años, lo que causó un brote de ántrax en los renos locales, con un saldo de más de 2.300 animales muertos.
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