El 2 de agosto, el viceministro de Defensa ruso, Yuri Borísov, comentó que el Ejército completó sus arsenales con varias piezas de armamento láser.
"Se trata de un arma cegadora, que se utilizará ante todo en las tropas terrestres para deslumbrar y neutralizar equipos de reconocimiento óptico, dispositivos de apuntamiento y otros", dijo Ivashov a RIA Nóvosti.
Ivashov recordó que los láseres de uso militar ya fueron ensayados en las Fuerzas Armadas rusas.
Así, estaba previsto proveer a las unidades motorizadas de emisores de rayos láser capaces de dañar la vista de los soldados enemigos.
Las tropas de Defensa Antiaérea, a su vez, utilizarían los emisores láser para destruir blancos aéreos que se desplazan a baja altura, incluidos misiles de crucero.
Sin embargo, esos planes no se concretaron debido a la imposibilidad de proveer los equipos láser de las fuentes de energía necesarias.