"EEUU está gravemente preocupado por las acciones del Gobierno y la Corte Suprema para limitar el espacio democrático antes de que las elecciones presidenciales y legislativas de noviembre", dijo Kirby.
Washington "urge con firmeza al Gobierno nicaragüense a crear un entorno más abierto para unas elecciones libres y justas que permitirán al pueblo de Nicaragua determinar el futuro de su país", añade el texto.
El 29 de julio, el Tribunal Supremo Electoral separó de sus escaños a 28 legisladores del PLI, 16 titulares y 12 suplentes.
Para el Departamento de Estado, "las elecciones creíbles y la pluralidad política son fundamentales para toda democracia sólida; la sociedad civil nicaragüense, los dirigentes empresariales y religiosos seguirán reclamando que se fortalezcan las instituciones, (se respete) la separación de poderes y (se celebre) un proceso electoral justo".
El actual presidente, Daniel Ortega, aspira a renovar su mandato en los comicios de noviembre.