"En cuanto a las acusaciones directas o indirectas contra el Kremlin, o Rusia en general, de que podrían estar de alguna manera implicados en los ciberataques, son un absurdo total y un claro ejemplo del uso de la rusofobia y la incitación de ella con fines electorales en EEUU", dijo.
De esta manera Peskov comentó a la prensa las declaraciones del candidato republicano Donald Trump que pidió a Rusia que ayude a localizar los correos electrónicos que la ex secrataria de Estado y candidata demócrata, Hillary Clinton, había borrado de su servidor privado.
If Russia or any other country or person has Hillary Clinton's 33,000 illegally deleted emails, perhaps they should share them with the FBI!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 27 июля 2016 г.
"No nos dedicamos a hackeos y no tenemos ninguna relación con esta actividad", dijo Peskov.
En los correos se puede comprobar cómo el partido favoreció a la ex secretaria de Estado Hillary Clinton en las elecciones primarias y buscó desacreditar a su rival, el senador por Vermont Bernie Sanders.
Un representante de la sede electoral de Clinton declaró que los servidores del partido fueron hackeados por piratas informáticos rusos, lo que apuntaría, en su opinión, a las intenciones de las autoridades rusas de ayudar a Trump.
Assange: "Equipo de #Clinton hace acusaciones falsas para desviar la atención" https://t.co/k9k0RH5Xog pic.twitter.com/g7AFF5N65j
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 27 июля 2016 г.
Por su parte, el magnate se burló abiertamente de esas acusaciones en contra de Rusia, calificándolas de "chiste" en un mensaje de Twitter.
La filtración de estos e-mails 'hackeados' obligó a la presidenta del Comité Nacional del Partido Demócrata de EEUU, Debbie Wasserman Schultz, a presentar su dimisión.
Los estadounidenses están llamados a las urnas el 8 de noviembre de 2016 para elegir a su presidente.