"La verdad es que no hemos recibido ayuda del Gobierno Nacional y por ello estamos pensando en declarar la emergencia pública, para que el Gobierno disponga los recursos que se requieren para atender esta situación, porque siguen llegando a nuestra población, y entre los migrantes también están naciendo niños", dijo Abuchar a la emisora Radio Santa Fe.
También agregó que se espera la llegada de 3.000 cubanos más con capacidad económica suficiente para rentar habitaciones en ese puerto sobre el Océano Atlántico, cerca de la frontera con Panamá.
La visita de migrantes a la región se ha intensificado a raíz del incremento en la vigilancia fronteriza en Panamá, Costa Rica y Nicaragua.
De acuerdo con cifras del estatal Migración Colombia, entre comienzos de mayo y mediados de junio, 1.107 migrantes irregulares fueron detectados en Turbo y Capurganá —una playa próxima a Panamá—, y de estos, 50% procede de Haití y 15% de Cuba, mientras que el resto son africanos (26%) y asiáticos (9%).
La funcionaria señaló que Colombia ha deportado cerca de 80 ciudadanos cubanos a la isla directamente y otros más a Ecuador, país con el que tiene un acuerdo para devolver a los migrantes que ingresan ilegalmente a su territorio a través de la frontera común.
Las salidas de cubanos de su país se dispararon desde que EEUU y Cuba reanudaron sus relaciones diplomáticas en julio del año pasado, pues muchos ciudadanos de la isla caribeña temen ahora perder los privilegios migratorios que les ofrece Washington.
El trayecto que siguen estos emigrantes para llegar a EEUU implica pasar por distintos países de América del Sur, América Central y por México.