“No habrá más guardia presidencial, no tenemos tal objetivo ni necesidad”, declaró a la cadena A Haber.
Previamente se informó de la detención de 300 militares de esta unidad a raíz del golpe fracasado que causó, según Yildirim, la detención de poco más de 13.000 personas, incluidos 8.831 militares, 1.329 policías y 2.100 jueces y fiscales.
Turquía vive bajo estado de excepción declarado por tres meses a raíz de un fallido golpe militar que se saldó con 246 muertos —sin contar a los golpistas— y casi 2.200 heridos.