"Ahora hay un ambiente mucho más abierto aunque se mantenga el embargo", dijo López Levy, quien enumeró que Cuba ha tenido visitas muy importantes en el último año, como la del presidente francés François Hollande, y el vicecanciller (vice primer ministro) de Alemania, Sigmar Gabriel.
En julio y agosto del año pasado se reabrieron las embajadas de Cuba y Estados Unidos en Washington y La Habana respectivamente, lo que supuso una mejora en los vínculos entre ambos países, no obstante se mantiene el bloqueo comercial contra la isla.
López Levy, profesor de la estadounidense Universidad de Río Grande Valley, en el estado de Texas (sur), cree que las empresas encargadas de hacer lobby en Washington para levantar el bloqueo comercial contra Cuba no tienen el mismo poder que los que sí apoyan el embargo.
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"Yo creo que al grupo de cabildeo antiembargo que se ha creado en Washington todavía le falta mucha eficiencia para ganar; no es temeroso, no se compromete en curso de rechazo total, tanto a la política de embargo como a los que la han defendido en los últimos años que son los sectores más intervencionistas y más reaccionarios dentro del sistema norteamericano", aseguró.
No hay marcha atrás para lo alcanzado
Para López Levy, es posible que tanto la candidata por el Partido Demócrata, Hillary Clinton, como su rival por el Partido Republicano, Donald Trump, "no le den el perfil que en el último tiempo le dio Obama".
Sin embargo, consideró el politólogo, "no va a ser fácil" que queden por el camino los avances logrados, aun si el Congreso "sigue en manos republicanas e incluso si el presidente electo es Donald Trump".
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En referencia al candidato republicano, el mediático multimillonario Donald Trump, es más difícil conocer cómo actuará porque "cambia de opinión como cambia de medias", pero también aclaró que la esposa del expresidente Bill Clinton (1993-2001) "es una candidata que ha tenido numerosas inconsistencias en su proyección".
La reapertura de las embajadas fue considerada por las autoridades de ambos países como la finalización de la primera etapa de la normalización de las relaciones bilaterales.