"Decisión de @CConstitucional es gran noticia para los colombianos", celebró el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, a través de su cuenta de Twitter, tras conocerse la información.
Decisión de @CConstitucional es gran noticia para los colombianos. Me referiré a ella en alocución a las 9 pm.
— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) 19 de julio de 2016
El mecanismo se trata de un plebiscito especial que sería convocado por Santos únicamente con el objetivo de consultarle al pueblo si está de acuerdo o no con el Acuerdo Final para el fin del conflicto.
Si por el contrario, gana el "No", los acuerdos de paz que se desarrollan desde noviembre de 2012 en La Habana con esa guerrilla habrán llegado a su final y no se podrán implementar, por lo que, en teoría, continuaría el conflicto armado en el país.
Aunque durante buena parte de las negociaciones las FARC expresaron su rechazo a la refrendación de los acuerdos por medio de un plebiscito y en su lugar proponían que se llevara a cabo una Asamblea Nacional Constituyente, el pasado 23 de junio, durante la firma del protocolo del cese del fuego bilateral y de hostilidades, señalaron que se acogerían a la decisión que tomara la Corte, la cual fue dada a conocer esta noche.
Lo anterior significa que sólo será necesario que 4,4 millones de colombianos (de un total de 33.820.199 habilitados para sufragar) aprueben los acuerdos y que esa votación sea superior a los votos en contra, lo cual es fuertemente cuestionado por varios sectores sociales y políticos, al considerar que es una muestra muy pequeña de ciudadanos los que tienen la capacidad de elegir si aprueban o no lo acordado en La Habana.
El plebiscito por la paz, que según el Gobierno confía que se pueda llevar a cabo el próximo mes de septiembre, luego de que en agosto el Gobierno y las FARC firmen el armisticio, se realiza con la intención de conocer si la ciudadanía está de acuerdo con lo que se logre en La Habana, por lo no es una convocatoria para votar en contra de la paz.
El conflicto armado colombiano, que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares, agentes del Estado y grupos narcotraficantes, es el más antiguo del continente y ha dejado unos 300.000 muertos, 45.000 desaparecidos y 6,8 millones de desplazados, según reportes oficiales.