"Aún no podemos referirnos acuciosa y seriamente a lo qué gana Chile y cuáles podrían ser los déficits en cuanto al cierre de estas negociaciones, puesto que no contamos con la información necesaria como para realizar este balance", dice el informe 'TPP: impacto en Chile y la región', elaborado por la Dirección General de Relaciones Internacionales de la Cancillería (Direcon) del país andino.
El documento de 27 páginas fue la respuesta a varios oficios del diputado chileno Giorgio Jackson, en los cuales el legislador solicitó más información sobre el acuerdo firmado por su país en febrero de 2016.
#NuevaZelanda Canciller @HeraldoMunoz suscribió Acuerdo Transpacífico, junto a otros once países. pic.twitter.com/JLw3lJbssX
— Cancillería Chile (@Minrel_Chile) 3 de febrero de 2016
El informe plantea que el pacto "podría llegar a tener efectos políticos, económicos y comerciales controversiales en los procesos de integración regional en curso en América del Sur". Exhorta a evitar que aliados naturales para Chile, como Argentina y Brasil, vean la incorporación del país al TPP "como un problema geopolítico ajeno a los intereses de ellos y del proceso de integración regional en América del Sur".
El Acuerdo Transpacífico es un proyecto de integración para la región Asia-Pacífico, en el que participan, además de Chile, Brunei, Nueva Zelanda, Singapur, Australia, Canadá, Japón, Malasia, México, Perú, Estados Unidos y Vietnam.
Anteriormente, un acuerdo similar al TPP, el Tratado Transatlántico de Comercio e Inversión (TTIP), que propone el libre comercio entre la Unión Europea y Estados Unidos, ha sido objeto de crítica por varios países europeos, entre ellos Francia.