Los primeros felinos que fueron trasladados a los bosques del Cáucaso —dos machos Ajún y Killi y una hembra, Victoria— llevan collares que transmiten vía satélite su ubicación.
“Hoy ponemos en libertad a los dueños verdaderos de la naturaleza (leopardos), es un acontecimiento histórico”, indicó en la ceremonia el vice primer ministro ruso, Alexandr Jloponin.
Según el jefe del centro de recuperación de leopardos, Umar Semiónov, el lugar para poner en libertad a los leopardos fue elegido teniendo en cuenta los hábitats de otros animales y la ubicación de las localidades cercanas.
Sin embargo los nuevos habitantes del bosque corren diversos peligros como las zonas de rocas u otros animales.
“Hicimos todo lo posible, los enseñamos a cazar y a evitar al hombre, los leopardos pasaron nuestras pruebas con éxito”, explicó Semenov.
Después de que los leopardos regresen a la vida salvaje, el grupo especial seguirá controlando el estado de los animales y vigilará su reproducción.
"Esperamos elegir y preparar un lugar adicional, en particular territorios del Cáucaso, para liberar a los leopardos entrenados para la vida silvestre", explicó.
Según Donskoi, para crear una población estable de leopardos (alrededor de 50 leopardos adultos), es necesario liberar a los animales anualmente.
"Para hacerlo se necesita por lo menos cinco zonas de 200.000 hectáreas, conectadas por vías seguras para los animales", dijo Donskoi.
El ministro no comentó cuándo dispondrá el centro de recuperación de los 50 leopardos que se requieren, pero afirmó que están entrenando a leopardos de diferente sexo y también se liberarán en la mismas zonas leopardos traídos del extranjero.
Actualmente esta variedad de leopardo casi no se encuentra en la zona del Cáucaso y está en la lista roja de especies en peligro de extinción.
El Ministerio de Recursos Naturales de Rusia junto al Parque Nacional de Sochi, la reserva del Cáucaso, el Instituto de Problemas de Ecología y Evolución, el Parque zoológico de Moscú y WWF de Rusia con la asistencia de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) y la Asociación Europea de Zoos y Acuarios (EAZA) llevan a cabo el programa de reintroducción de los leopardos de Persia en el Cáucaso occidental, iniciado en 2009 por el presidente ruso, Vladímir Putin.