El hallazgo, afirma la policía, podría ayuda a investigar los actos terroristas.
"Será suficiente hacerle un análisis de sangre al sospechoso para saber si manipuló TATP, la sustancia que usan para fabricar bombas", apunta el diario.
En el contexto de este descubrimiento, comunica el periódico, los agentes de la unidad antiterrorista de la Policía de Bélgica exigieron que se les dote de equipos especiales para proteger su salud.
El 22 de marzo una doble explosión sacudió el aeropuerto internacional de Bruselas y una tercera detonación se registró en una estación del metro.
Los hechos, reivindicados por el grupo terrorista Daesh (el autoproclamado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países), dejaron 32 muertos y 340 heridos.
En noviembre de 2015 la capital francesa fue blanco de una cadena de ataques terroristas que causaron 130 fallecidos y más de 350 heridos de diversa consideración.