"Solo podemos aplaudir que estas dos naciones importantes cooperen entre sí y con otros miembros del ISSG (Grupo Internacional de Apoyo a Siria)", dijo Dujarric.
Después de que Turquía derribara en noviembre pasado el bombardero ruso Su-24 en Siria, Rusia impuso restricciones económicas al país en los ámbitos de comercio, educación, turismo y empleo.
Dos días después, Putin y Erdogan mantuvieron una conversación telefónica en la que acordaron proceder al restablecimiento de la cooperación.
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El jueves el presidente ruso firmó un decreto que modifica las medidas restrictivas en contra de Turquía, levantando la prohibición de venta de paquetes turísticos y de vuelos chárter y encomendando al Gobierno ruso intensificar los contactos para cancelar gradualmente las demás medidas.