La cadena Euronews recopiló las declaraciones de varios líderes de formaciones rupturistas que expresaron su punto de vista respecto al futuro de la UE y explicaron por qué el colectivo corre riesgo de disolución.
"Los sondeos han demostrado que la mayoría de la población de Holanda quiere salir de la Unión Europea", destacó Nigel Farage, líder del Partido de la Independencia del Reino Unido —UKIP, por sus siglas en inglés—, y agregó que los holandeses están al borde del "Nexit" —Netherlands Exit—.
Farage recalcó que una situación semejante se cierne sobre Dinamarca, Suecia, Austria y hasta Italia.
"La UE se está disolviendo, se está muriendo", insistió.
Los candidatos a salir
En realidad, Holanda puede convertirse en el próximo país candidato a salir de la Eurozona: el 47% de su población se muestra partidario de esta opción. El líder del Partido de la Libertad holandés, Geert Wilders, va a poner el foco en este hecho durante su campaña electoral.
Austria estuvo muy cerca de elegir hace unas semanas a un presidente ultraderechista, el líder del Partido de la Libertad de Austria, Norbert Hofer, que activamente promovía la cuestión de la persistencia del país centroeuropeo en la UE.
La líder del Frente Nacional francés, Marine Le Pen, también está en las filas de los 'euroescépticos' y aspira a lograr la Presidencia del país galo el próximo año. Ella no esconde sus planes de seguir el ejemplo de su vecino del norte.
"Prometo conducir a mi país por el camino de libertad, el único camino para la gloria. ¡Viven los pueblos libres, viva Gran Bretaña, viva Francia!", proclamó.
"Mucho dependerá de lo que pase con el Reino Unido. El mundo exterior no debe percibirlo como algo muy atractivo", expresó el politólogo Ian Bond.
De todas maneras, dice la cadena de televisión, la gestión de los países europeos deberá tener en cuenta las aspiraciones de los 'euroescépticos', puesto que a veces estas voces cristalizan en formas que nada tienen que ver con los movimientos de ultraderecha o populistas, como en el caso de Dinamarca y Suecia.
Esta clase de 'euroescepticismo' no puede ser ignorada por los partidos gobernantes, concluyó Euronews.