Barrientos, que tiene nacionalidad estadounidense, torturó al cantante y compositor de izquierdas Jara y le disparó dos veces en la cabeza mientras este estaba detenido en el Estadio Nacional, días después del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 en Chile, alegaron los abogados de la familia del asesinado, según el diario local The Daytona Beach News-Journal.
El procesado dijo el viernes al periódico de Daytona Beach, ciudad en la que reside, que el día de la muerte de Jara él ni siquiera se encontraba cerca del Estadio Nacional, donde la dictadura encerró y torturó a miles de opositores.
A Jara le amputaron los dedos de sus manos y le dispararon 44 veces, según denuncias y datos históricos.
Aunque ninguno de los soldados testificó haber visto a Barrientos in fraganti, todos aseguraron que el exteniente estaba en el estadio, que vieron cuerpos de víctimas asesinadas y oyeron a presos políticos sometidos a tortura en los vestuarios del recinto.
Uno de los conscriptos dijo haber escuchado a Barrientos jactarse ante otro teniente de que había liquidado a Jara con su pistola Luger.
La muerte de Jara fue un crimen emblemático de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), responsable de unas 3.200 muertes y de decenas de miles de detenciones y torturas por causas políticas.