La distancia máxima del vuelo será de 630 kilómetros, la velocidad máxima alcanzará los 300 kilómetros por hora. La aeronave será capaz de funcionar durante todo el día y bajo cualquier condición climática, añadió.
Según Popov, la parte china asumió la financiación completa del proyecto conjunto. La contribución rusa consiste en asegurar la parte técnica del helicóptero de acuerdo con los deseos de los clientes chinos.
En China, estas máquinas se hicieron famosas en la primavera de 2008, cuando todo el país seguía el progreso de la operación de socorro en Sichuan. Con la ayuda de dos Mi-26 rusos, se logró desplegar rápidamente las tropas de rescate, la maquinaria de construcción, los alimentos y medicinas a las zonas montañosas gravemente afectadas por el terremoto. Posteriormente, China compró varios helicópteros de este tipo.