"Las declaraciones sobre la postura de Rusia del primer ministro del Reino Unido, Cameron, antes del plebiscito, no tienen ningún fundamento", dijo al calificarlas de "un intento poco correcto de influir en la opinión pública en su propio país".
A la vez aseguró que en Rusia "nunca intervenimos ni nos pronunciamos al respecto", sino "seguimos atentamente el proceso sin influir sobre él".
También descartó que el Brexit afecte la política europea de sanciones.
“En lo que se refiere a la política de sanciones, no creo que (Brexit) influya en nuestras relaciones con la UE en ese aspecto”, dijo a la prensa.
Recordó que no era Rusia quien impuso las sanciones, es que el país solo tomó las medidas en respuesta a las restricciones en su contra.
Añadió que si algún día las contrapartes de Rusia están listas para un diálogo constructivo, Moscú está dispuesto a participar en él.
Putin indicó que Rusia está dispuesta a responder de forma positiva a decisiones convenientes respecto a sanciones.
Añadió que Rusia corregirá en caso necesario la política económica y las relaciones con la UE.
El mandatario afirmó que Rusia trabajará para minimizar las consecuencias del Brexit.
Putin subrayó que el Brexit tendrá consecuencias para el Reino Unido, Europa y Rusia.
Puntualizó que las consecuencias que son "inevitables" tendrán un "carácter global".
Indicó que los mercados se asentarán pero podrán recuperarse en el futuro.
Vladímir Putin alertó que la situación de la seguridad en la Unión Europea ha empeorado con la crisis migratoria como telón de fondo.
"Al parecer la gente no está satisfecha también por la situación de la seguridad que a día de hoy se ha deteriorado bruscamente en el contexto de los fuertes procesos migratorios", dijo Putin.
Reiteró que el abandono de la Unión Europea es una voluntad de los ciudadanos del Reino Unido.
El histórico referéndum sobre la salida del Reino Unido de la UE se celebró el 23 de junio, según datos oficiales a favor del 'Brexit' votaron el 51,9 por ciento de los británicos.