Sin explicar en su comunicado la decisión de separarse del FpV, el Movimiento Evita se limitó a señalar que Argentina "está transitando un momento de profunda gravedad política, social y económica", y que "no podemos dejar que la corrupción ensucie la única herramienta que tienen los trabajadores para conquistar derechos: la política".
Estas declaraciones hacen alusión a la detención del exsecretario de Obras Públicas durante los Gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015) de Kirchner, José López.
El exfuncionario, mano derecha del exministro de Planificación de 2003 a 2015 Julio de Vido, fue imputado por enriquecimiento ilícito después de que la semana pasada fuera detenido en las inmediaciones de un convento de la provincia de Buenos Aires intentando ocultar cuatro bolsas que contenían casi 10 millones de dólares.
De todas maneras, los parlamentarios expresaron su disconformidad con la política del presidente Mauricio Macri y dejaron claro que seguirán siendo oposición.
"Hoy lanzamos este nuevo bloque, como una herramienta legislativa que le haga frente al avance del ajuste y de las medidas antipopulares que está llevando adelante la gestión de Macri", anunciaron en un comunicado.
Los seis legisladores renunciaron ocho días después de que tres diputados y una senadora de la provincia argentina de Misiones (noreste) también rompieran con el bloque que llevó a los expresidentes Néstor Kirchner y Cristina Fernández al Gobierno.
"Quienes ocuparon y ocupan un lugar en la función pública deben estar a disposición de la justicia", subrayaron en su comunicado.
El Movimiento Evita, una de las principales organizaciones que conformaba el Frente para la Victoria, mantenía divergencias desde hace tiempo con el ala más dura del kirchnerismo, representada en la organización La Cámpora.
La coalición del FpV ha sufrido una sucesión de rupturas desde que ganó en diciembre de 2015 el presidente Mauricio Macri. La primera tuvo lugar en febrero, cuando una quincena de diputados se desgajaron de la fuerza para conformar el Bloque Justicialista (peronismo).
La alianza kirchnerista queda entonces más debilitada en la Cámara de Diputados, donde pasó de tener 98 diputados en diciembre pasado a los 70 actuales. La coalición está cada vez más rezagada del interbloque oficialista Cambiemos (centroderecha), que posee 87 legisladores procedentes de los partidos PRO, la Unión Cívica Radical y Coalición Cívica.
No obstante, el FpV sigue siendo la principal fuerza opositora del recinto, con casi el doble de escaños que tiene la tercera fuerza de la Cámara, el Frente Renovador.