En concreto, critican el recorte del 40% del valor de la paga extra que reciben a final de año y la extinción de la Indemnización de Representación en el Exterior (Irex), según informaciones del diario "Correio Braziliense".
"El Ministerio de Relaciones Exteriores se está enfrentando a dificultades para mantener el pago regular de las ayudas a la vivienda a los funcionarios que están en el exterior, debido a las severas restricciones presupuestarias", asumía el propio Ministerio en un comunicado a última hora de la tarde de este jueves.
Además, ha informado de que se han pedido créditos adicionales por valor de 580 millones de reales (173 millones de dólares) y que tan pronto el Tesoro Nacional libere esos recursos los pagos serán "regularizados".
A pesar de que por el momento no hay datos sobre el seguimiento de la huelga el comunicado del ministerio resalta que las negociaciones tendrán que llevarse a cabo entre el sindicato mayoritario –Sinditamaraty— y el ministerio de Planeamiento, que es quien administra los salarios.