Como miembro de la OTAN, el país otomano quisiera involucrar a la Alianza en una guerra con Rusia. Por eso derribó el bombardero ruso, según del Valle.
Además, el país otomano emplea su estatus como miembro de la Alianza para "sabotear muchos de los proyectos de cooperación entre Grecia y Chipre", según del Valle.
"Bombardeando a su propia población —los kurdos— y albergando campos de entrenamiento de los combatientes islamistas", mientras emplea el chantaje contra Europa en la crisis de los refugiados, Turquía se comporta como un "estado mafioso".
Los objetivos a largo plazo de las autoridades turcas son "la islamización de Europa, y luego de todo el mundo", aseveró el analista francés.
"Turquía es un agujero negro de la geopolítica que alimenta la amenaza del terrorismo islamista", concluyó.