El viceministro de Exteriores, Ígor Morgúlov, y el encargado de la Cancillería japonesa para las relaciones con Rusia, Chikahito Harada, celebraron el 22 de junio en Tokio la tercera ronda de las conversaciones ruso-japonesas sobre el tratado de paz, indica el comunicado ministerial.
"Se logró un acuerdo de continuar el diálogo en este formato", dice la nota.
Según Harada, Japón considera que últimamente las relaciones con Rusia se desarrollan de forma dinámica gracias a un intenso diálogo político.
Por su parte, Morgúlov afirmó que las rondas anteriores "fueron muy útiles" y "permitieron acercar las posturas respecto a las realidades históricas".
Tokio condiciona su firma a la devolución de las cuatro islas del archipiélago de las Kuriles (Iturup, Kunashir, Shikotan y Habomai) alegando el Tratado Bilateral de Comercio y Fronteras que suscribió con Rusia en 1855.
Moscú, a su vez, señala que estos territorios fueron traspasados a la Unión Soviética tras la Segunda Guerra Mundial en virtud de acuerdos internacionales y que Rusia asumió la soberanía de dichos territorios como sucesora legal de la URSS.