Santos ganó la presidencia de Colombia el 20 de junio de 2010, y apenas dos años y tres meses después, el 19 de noviembre de 2012, dio inicio al que hoy en día es considerado el más extenso y fructífero acuerdo de paz del país suramericano.
Una historia de fracasos
Durante décadas, el logro de la paz fue esquivo a otros gobiernos, como el de Belisario Betancur (1982-1986) y Andrés Pastrana (1998-2002), cuyos intentos se vieron frustrados por diálogos interrumpidos o, cuando no, los logros alcanzados fueron apenas un remedo de fin del conflicto.
Así las cosas, fue preciso aguardar 10 años para que se iniciara otro proceso de paz con las FARC y cuatro más para que Santos sellara un cese bilateral del fuego con esa guerrilla, que será efectivo una vez las partes firmen el acuerdo.
De halcón a defensor de la paz
Aunque para el grueso de sus contradictores Santos traicionó la línea de política impulsada por Uribe que lo llevó al poder, lo cierto es que con el cese del fuego y el armisticio con las FARC quedará en los anales de la historia como el único presidente que alcanzó ese logro para el país.
Santos prefirió dar vuelta la página y seguir adelante con el proceso para terminar con una guerra de 52 años que dejó unos 300.000 muertos y cerca de ocho millones de damnificados.
Un presidente formado en EEUU
Durante su carrera pública ha ejercido como jefe de la delegación de Colombia ante la Organización Internacional del Café (OIC), en Londres, como ministro de Hacienda y como ministro de Defensa Nacional, cargo en el cual le correspondió liderar la aplicación de la Política de Seguridad Democrática de Uribe.
El expresidente ha sido, justamente, el más amargo opositor de los esfuerzos de paz de Santos, que ahora dan frutos.