El empresario afirmó que un proceso similar, pero de signo inverso, se observó cuando se desintegraba la Unión Soviética y el bloque europeo prosperaba.
Soros agregó que "el destino de la UE depende, más que nunca, del futuro de Ucrania".
En febrero de 2015, Soros aseguró que la Ucrania actual es un modelo a seguir para Bruselas. A la vez, acusó a los países occidentales de "no cumplir con las decisiones relativas a ayudar a Kiev".
Según indicó, Ucrania está al margen del crac económico y la Unión Europea debe aplicar medidas urgentes para prevenir el colapso.
Anteriormente, Soros sugirió que, si el próximo 23 de junio los británicos votan por abandonar la UE, el día siguiente al referéndum será un "viernes negro" similar al "miércoles negro" —el 16 de septiembre de 1992, cuando se derrumbó bruscamente la libra esterlina—.