Y es que el Comité Olímpico Internacional apoyó la decisión de la Federación Internacional de Atletismo de suspender a los atletas rusos para los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016. Sólo podrán participar aquellos atletas rusos no sospechosos de dopaje luego de pasar las correspondientes pruebas en laboratorios autorizados.
Esta es una situación muy grave, según el Dr. Armando Fernández Steinko, profesor de la Universidad Complutense de Madrid, para quien el COI es un espacio en el que algunos países pueden conseguir objetivos políticos mediante la presión a otros. Esto también constituye un hecho muy peligroso y ataca directamente al espíritu olímpico, que desde el principio se ha esforzado mucho por dejar afuera las cuestiones políticas.
El analista sostiene que a lo largo de la historia del olimpismo internacional hubo momentos muy críticos, como el caso de los JJOO de 1936 en Berlín bajo el régimen de Adolf Hitler, a pesar de lo cual se celebraron.
La primera vez que se rompió esa neutralidad política, recuerda Steinko, fue en los JJOO de Moscú en 1980, cuando el presidente de EEUU, Ronald Reagan, cambió todas las reglas del juego que se habían venido respetando tras la finalización de la Segunda Guerra Mundial en lo que se refiere al deporte, al no dejar fuera de él varias cuestiones, incluida la política.
En esta sanción se da la ironía que fuese lord Sebastian Coe quien aprobase la prohibición de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) a los atletas rusos de participar en los JJOO en Río, siendo Coe el ganador del oro en los Juegos Olímpicos de Moscú, ignorando el boicot de los juegos por parte del Reino Unido. En 1980, Coe afirmó que no se debía mezclar el deporte con la política.
Fernández Steinko indica que, detalles técnicos aparte, la coyuntura política global actual parece ser la única explicación de que sean sancionados sólo atletas rusos cuando existen atletas de otros países en las mismas condiciones y no son sancionados.
Todo se enmarca en el contexto de la OTAN, de la política de contención en torno a Rusia similar a la que se aplicó después de la Segunda Guerra Mundial en torno a la URSS, y es lo que parece ser que está detrás con esta sanción a los atletas rusos, señala el experto.
Se sabe las posibilidades que tienen los atletas rusos y es ahí donde se va a atacar, haciéndole pagar a terceros cosas que no tenían por qué pagar, es decir, deportistas que ni siquiera son sospechosos. Este tipo de acciones generan una sensación de injusticia que luego tiene respuestas.
El Dr. Armando Fernández Steinko recuerda que el espírutu olímpico nació a finales del siglo XIX como una suerte de freno de seguridad para evitar conflictos mayores, reducir los enfrentamientos diplomáticos y contribuir a generar un espírutu de no violencia entre los países.