El acuerdo intergubernamental determina que los contratistas rusos se encargarán de construir la parte del puente que pasa por el territorio ruso, lo que corresponde a dos tercios del total de la extensión del futuro proyecto. Durante las obras de la infraestructura, se crearán 1.400 puestos de trabajo.
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Recientemente, representantes de los dos países firmaron un acuerdo de concesión para la construcción de la obra durante la XXVII Feria de Economía y Comercio de Harbin. El contrato supone la finalización de los preparativos de la construcción del puente y establece las fases, términos y condiciones generales a tener en cuenta durante la obra. Además, comprende los precios del peaje por usar el puente, las condiciones de préstamo para los trabajos y la obtención de la licencia estatal, según se informa en el sitio web del gobierno regional.
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En marzo de 2016, China y Rusia registraron una empresa conjunta formada por los dos países que se encargará de supervisar y garantizar los trabajos de construcción.