"Caso Nisman vuelve a la jueza Palmaghini", confirmaron a Sputnik Nóvosti fuentes judiciales.
La Cámara del Crimen había secundado a la jueza Palmaghini cuando aceptó en abril que el caso estuviera en manos de la justicia federal, al sostener que Nisman murió como consecuencia de su labor como fiscal federal.
A diecisiete meses del fallecimiento del fiscal, los tres jueces del tribunal aceptaron un planteo realizado por la defensa del informático Diego Lagomarsino, único imputado del caso, para que el expediente volviera al fuero ordinario.
La Cámara del Crimen había secundado la decisión de la jueza Palmaghini cuando aceptó en abril que el caso estuviera en manos de la justicia federal, al sostener que Nisman murió como consecuencia de su labor como fiscal federa.
"De momento, no es posible aseverar, con fundamentación razonable, que la muerte del fiscal Natalio Alberto Nisman haya sido consecuencia de la conducta de un tercero", objetó la Cámara en su fallo.
La Cámara aceptó de así el reclamo del experto informático Diego Lagomarsino, sospechoso en la causa por haberle prestado a Nisman el arma con el que perdió la vida.
"La orfandad de elementos agregados al proceso que permitan concluir que debe darse intervención a la Justicia de excepción, determina que continúe investigando, con debida celeridad y eficiencia, el magistrado que ha prevenido hasta el momento" añadió el tribunal en su resolución.
Desde el comienzo de la investigación y durante más de un año, la causa estuvo a cargo de la jueza en lo criminal Fabiana Palmaghini, que delegó la investigación en la fiscal Viviana Fein, jubilada en mayo, y que era proclive a la hipótesis del suicidio.
Hasta su muerte el pasado 18 de enero de 2015, Nisman estaba a cargo de la Unidad Fiscal que investigaba el atentado de 1994 a la mutual judía Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) que causó 85 muertos.
Cuatro días antes de morir, el fiscal denunció a la expresidenta Cristina Kirchner (2007-2015) y otros funcionarios de su Gobierno por el supuesto encubrimiento de funcionarios iraníes acusados por la justicia argentina de ser los autores intelectuales del atentado.
El fiscal fue hallado en su apartamento de la ciudad de Buenos Aires con un tiro en la cabeza un día antes de tener que sustentar su denuncia ante el Congreso.