En el sitio web de la compañía, los pilotos anuncian vuelos que tienen planeados y los pasajeros potenciales los reservan a través del sistema. A parte de las rutas típicas, se ofrecen vuelos de exploración largos y cortos.
"No importa si quiere disfrutar de las vistas y paisajes hermosos con sus seres queridos o tiene que ir de un punto A a un punto B por negocios, Wingly se lo proporciona todo", según han publicado los creadores de la compañía en su página web.
Sin embargo, según advierten los creadores de la 'startup', los pasajeros deben tener en cuenta que la aviación privada es muy distinta a la comercial, puesto que los vuelos pueden ser cancelados por las condiciones climáticas o debido a motivos personales de los pilotos.
"El precio depende del tipo de avión. Un vuelo de ida y vuelta en un avión simple y pequeño será de unos 200 euros", comenta Lars Klein, uno de los creadores de la plataforma.
"Además, existe un sistema de evaluación mutua donde pilotos y pasajeros pueden dejar sus comentarios después del vuelo", concluye el empresario.
Por el momento, Wingly está disponible en Alemania, Francia, Suiza, Austria y Bélgica. Sin embargo, los creadores prometen que el mapa de vuelos pronto incluirá más países.