"En la etapa actual es necesario organizar la interacción entre las regiones del Ártico y los sujetos administrativos con el objetivo de recopilar, generalizar y elegir propuestas de espacios con perspectiva para desarrollar energía renovable y utilizar tecnologías innovadoras en la rama energética local, además de desarrollar a niveles regionales de Rusia las metodologías de esquemas locales de ubicación de las fuentes menores de energía en la zona ártica", orientó el funcionario ruso tras una reunión de la Comisión Estatal de Desarrollo del Ártico.
"A las zonas de suministro energético autónomo del Norte, Lejano Oriente y Siberia se transportan anualmente hasta 6 a 8 millones de toneladas de combustibles líquidos y entre 20 y 25 millones de toneladas de carbón. Debido al alto componente de transporte el precio del combustible se duplica e incluso triplica en comparación con los precios de los productores", señaló.
Según el vice primer ministro, "uno de los medios para reducir los gastos de suministro de combustible a las regiones del Ártico consiste en el uso de recursos renovables".
"Además, la región del Ártico se caracteriza por una cantidad considerable de usuarios que viven y trabajan fuera de las urbanizaciones, se trata de pueblos nativos, y además de turistas, pescadores, militares; la presencia de este tipo de consumidores otorga especial vigencia al desarrollo de acumuladores energéticos ligeros y compactos", aseveró.
Rogozin añadió que en la actualidad ya han sido eliminados los principales obstáculos institucionales que dificultaban el desarrollo de las fuentes de energía renovables, ha sido conformada una nueva base legal, "sin embargo, ahora hay que llevar todo esto al metal".