"Estamos interesados en levantar las sanciones una vez se cumplan los Acuerdos de Minsk", dijo el diplomático.
A la vez, instó a "mantener la cooperación, los proyectos que sirven de buen ejemplo" en las relaciones UE-Rusia.
Desde marzo de 2014, EEUU y la UE pusieron en marcha sanciones individuales y sectoriales contra Rusia por su actuación en la crisis de Ucrania y lo que califican de "anexión ilegal" de Crimea.
Además de la prohibición de entrada y la congelación de activos para decenas de cargos públicos y empresarios, Occidente prohíbe exportar a Rusia armas, productos de doble uso y tecnologías para la producción de hidrocarburos y no permite a los bancos rusos financiarse a más de 90 días en el mercado comunitario.
En respuesta, Rusia embargó algunas importaciones, principalmente alimentarias, procedentes de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.
El canciller ruso, Serguéi Lavrov afirmó con anterioridad que es "absurdo" que la UE condicione al cumplimiento de los Acuerdos de Minsk el levantamiento de sus restricciones al argumentar que "Rusia, como es sabido, no es parte del conflicto en Ucrania".