
El 31 de mayo, llegó "una nueva ronda de bronca" con las acusaciones por parte de Turquía, escribió el columnista. Ankara culpó al Kremlin de atacar un hospital en Idlib. Rusia descartó haber realizado misiones de combate en dicha región. En respuesta, las autoridades rusas instaron al país otomano a retirar inmediatamente sus tropas del norte de Irak.
Vladímir Putin, no obstante, habló de su demanda muy claro, indica el artículo. El Kremlin está esperando que los otomanos pidan disculpas formales y públicas, así como que indemnicen al país por el incidente con el avión. Es poco probable que Ankara acepte estas condiciones, analizó el autor.
Lea más: Rusia dice que la pelota está en el tejado de Turquía para normalizar las relaciones
"Turquía quiere dar un paso, pero no quiere que se vea como un paso atrás", explicó Semih Idiz, experto en diplomacia, citado por el periodista. Además, no hay presión internacional que pueda hacer a Turquía disculparse, añade el experto.
"Si Erdogan pudiera cambiar una decisión de política exterior, sería el derribo del avión ruso. Se arrepiente demasiado", aseguró Soner Cagaptay, analista del Instituto de Washington.
"Pero, teniendo en cuenta la personalidad de Erdogan, me cuesta imaginar que pida perdón. Sería la primera vez que reconociera su fracaso en política exterior", señaló Cagaptay, citado por el autor.
Asimismo, muchos creen que una disculpa pública podría parecerles humillante a los nacionalistas turcos, advierte el periodista. El líder del país otomano necesita su apoyo para cambiar el régimen de parlamentario a presidencial, ampliando de esta manera sus poderes.
Lea también: "Turquía bajo el poder de Erdogan está en camino hacia un Estado de un solo hombre"
"Ni Erdogan ni el partido en el poder pueden correr ese riesgo ni pagar ese precio político. No se puede hablar de ningún tipo de disculpa antes de que terminen las disputas sobre el cambio en la forma de gobierno", citó el autor del artículo las palabras del académico Ahmet Kasim Han.