El debate fue iniciado a instancias de la mayoría parlamentaria gobernante y el partido Los Verdes, que presentó su solicitud bajo el título 'Conmemoración del genocidio de los armenios y otras minorías cristianas en los años 1915 y 1916'.
"La masacre de los armenios en el Imperio Otomano durante la Primera Guerra Mundial fue la catástrofe más grande que provocó serias consecuencias en la historia del pueblo armenio porque la deportación y la matanza masiva, según cálculos independientes, costó la vida a más de un millón de los armenios", dice el documento.
La resolución indica que Alemania se siente responsable de intentar reconsiderar el genocidio de los armenios y respetar la memoria de esa tragedia.
"El Imperio Alemán fue el principal aliado militar del Imperio Otomano, el Gobierno alemán de aquel entonces estaba al tanto de las persecuciones y los asesinatos de los armenios pero de todas formas permanecía sin actuar; la República Federativa de Alemania se considera responsable de procurar de reconsiderar este crimen y respetar su memoria", se agrega.
Turquía rechaza tradicionalmente las acusaciones de genocidio, alegando que las víctimas de la tragedia de 1915 fueron ambos pueblos, el armenio y el turco.
Armenia insiste en el reconocimiento del genocidio por la comunidad mundial, ya lo reconocieron muchos Estados, así como el Parlamento Europeo y el Consejo Mundial de las Iglesias.