"Los cálculos elaborados por la Asociación Colombiana del Petróleo indican que en este periodo (los próximos seis años) la producción en los campos actualmente activos caería a un ritmo de 15 por ciento promedio anual", señaló el gremio en un comunicado, en el cual advierte que, de hecho, "ese pronóstico ya se está cumpliendo".
Anticipó que para este año la inversión en exploración y producción estaría próxima a los 3.820 millones de dólares, casi la mitad de lo necesario para mantener la producción, mientras que "para 2017 hay una alta probabilidad de caer por debajo de los 900.000 bpd".
De acuerdo con el comunicado, "la única manera de detener la caída en picada de la producción de hidrocarburos en Colombia es con mayor inversión".
"Este escenario implicaría un impacto en la balanza comercial, pues el país debería aumentar sus importaciones para poder producir los combustibles y demás productos procesados en las refinerías, esta afectación generaría además efectos negativos en los indicadores macroeconómicos del país", concluye el despacho de la ACP, gremio que reúne en el país a firmas como Chevron, Pacific E&P, ExxonMobil, Repsol, Shell y Petrobras.
Colombia es un pequeño productor de crudo, su producción diaria global es de alrededor de 92 millones de barriles diarios, la de este país es de un millón de barriles por día, lo que, no obstante, es importante para su economía, que se ha visto seriamente afectada por la contracción en los precios internacionales.