“No se están haciendo las gestiones necesarias” para que los empresarios comunitarios puedan volver a suministrar sus productos a Rusia, denunció en una entrevista con Radio Sputnik Lorenzo Ramos, secretario general de la UPA.
Ramos se mostró preocupado por la decisión del Gobierno ruso de continuar el veto, al menos, hasta el final de 2017. Al mismo tiempo, admitió que esta medida “es una respuesta”, ya que se adoptó después de que los líderes del G7 acordaran prolongar las sanciones al Kremlin y no descartaran endurecerlas.
“Lo que tenemos que denunciar es la falta de responsabilidad de la Unión Europea”, señaló el dirigente agrario.
Asimismo, responsabilizó a Bruselas de que “hay una crisis de mercado muy importante dentro de la UE, sobre todo en sectores como el de los lácteos, las carnes, las frutas y las hortalizas”.
Según Ramos, las ayudas que se destinan al sector agropecuario son “un parche” y no resuelven “el problema de mercado”.
También expresó su rechazo al TTIP, Tratado Transatlántico de Comercio e Inversiones entre EEUU y los Veintiocho. Si se firma el documento, la agroindustria comunitaria no podrá competir con la norteamericana, puesto que los estándares y los costes de producción en EEUU son mucho más bajos.