"Nuestros servicios de Inteligencia averiguaron los nombres de los individuos que colaboran con el Servicio de Seguridad de Ucrania espiando a los observadores de la misión internacional de la OSCE en el territorio controlado por el Ejército ucraniano", dijo.
Basurin señaló que las personas en cuestión notifican a los militares ucranianos de los cambios en los desplazamientos de los empleados de la OSCE lo que permite a los soldados esconder con antelación los equipos de combate prohibidos por los acuerdos de Minsk.
Afirmó además que estos datos se comunican a los radicales del grupo ucraniano Pravy Sektor, proscrito en Rusia, y a los mercenarios extranjeros en filas de las fuerzas ucranianas.