"En Moscú mantuve un encuentro con 18 empresarios británicos, les pregunté si alguno de ellos apoyaba las sanciones contra la Federación Rusa y ninguno levantó la mano", dijo en una entrevista a RIA Novosti.
Según el diputado, los empresarios "se dan cuenta de que ese hueco lo llenan los competidores chinos e indios, y eso sin contar que los rusos buscan ahora ser más autosuficientes, lo que obstaculiza aún más las exportaciones", indicó.
A la vez expresó que considera "muy malo" continuar con las restricciones contra Rusia, y dijo estar "contento de recibir apoyo de los empresarios británicos que trabajan" en el país.
Las relaciones entre Moscú y Occidente se deterioraron a raíz de la crisis ucraniana y particularmente tras la adhesión de la península de Crimea a Rusia.
EEUU, la UE y otros países occidentales aprobaron varios paquetes de sanciones contra ciudadanos, empresas y sectores enteros de la economía rusa, a lo que Moscú respondió con un veto agroalimentario.