El número de soldados alemanes aumentará por primera vez desde la caída del muro de Berlín. Serán reclutados cerca de 14.300 nuevos soldados y 4.400 funcionarios civiles hasta el año 2023, informó el periódico.
La ministra de Defensa germana, Ursula von der Leyen, puso fin públicamente, el pasado 10 de mayo, a la ley —introducida en 2011- que fijaba el límite máximo en 185.000 soldados.
"Hoy en día es necesario", declaró von der Leyen, en referencia al incremento de efectivos militares.
Desde la reunificación alemana, en 1990, el número de soldados de la ‘Bundeswehr' se redujo de 585.000 a 185.000. La disminución a gran escala del volumen de las Fuerzas Armadas se aceleró debido al auge de la crisis financiera y al espíritu ‘de paz' de la época.
El año 2014 marcó un antes y un después en la política de Alemania respeto a las Fuerzas Armadas. La propia Ursula von der Leyen emplazó entonces a Europa a invertir más en la OTAN, dado que EEUU cargaba siempre con una parte muy significativa de los gastos de la alianza.
La relación del pueblo alemán con respecto a la política militar de su país ha cambiado en los últimos años. La amenaza terrorista que pende sobre Europa en la actualidad, unida a las tensiones y conflictos crecientes entre Oriente y Occidente, hace que el 51% de la población se posicione de modo favorable al aumento de las tropas, mientras que, en 2009, apenas el 19% sostenía esa misma opinión.