"Vemos una nueva intensificación de la política exterior en esta zona, incluidos intentos directos de interferir en los asuntos internos de varios Estados de la región", dijo.
Previamente el presidente estadounidense, Barack Obama, declaró que Washington abría una nueva página en las relaciones con los países latinoamericanos.
En diciembre de 2014, Obama y el líder de Cuba, Raúl Castro, anunciaron el inicio del proceso de normalización de las relaciones bilaterales que culminó con la visita histórica de Obama a La Habana.
El líder estadounidense prometió además que presionaría al Congreso para que levantase el bloqueo económico impuesto a Cuba tras la revolución de 1959.