Ocho años antes de este acontecimiento, el 24 de mayo de 1822, Ecuador se había independizado de España, pasando a formar parte de la Gran Colombia bajo el nombre de Distrito del Sur, junto a los territorios de Quito y Cuenca.
En el año 1830, concretamente el 13 de mayo, el Departamento de Ecuador, mediante acta firmada por una Asamblea de Notables de Quito, resolvió retirarse de la denominada "Gran Colombia", pasando a formar un Estado independiente de nombre "República del Ecuador".
El Departamento del Sur —antigua Audiencia de Quito—fue el primero en separarse, allá por 1830, seguido de los Departamentos de Guayaquil y Azuay, que dejaron de pertenecer a la Gran Colombia unos días más tarde, el 19 y 20 de mayo.

En agosto del mismo año, el general Juan José Flores, jefe supremo del Gobierno en la República de Ecuador, convocó una Asamblea Constituyente en la que pidió establecer una Constitución para la República, la cual vio la luz el 22 de septiembre.
La constitución reflejaba la adhesión a la República de los Departamentos de Guayaquil, Azuay y Ecuador. A partir de aquel momento, Juan José Flores fue nombrado presidente de Ecuador.

La Gran Colombia, sueño de Simón Bolívar, había surgido en 1819 y, en el momento de su creación, era el país hispanoamericano que gozaba de mayor prestigio en el mundo. Tanto es así que varios políticos de Europa y América, entre ellos John Quincy Adams —por entonces secretario de Estado y futuro presidente de los Estados Unidos—, consideraron que estaba llamada a ser una de las naciones más poderosas del planeta.