El legislador subrayó que se trata de una medida "extrema" y confió en que no se llegue a ella.
No obstante, recordó que a la hora de ratificar el acuerdo, los parlamentarios rusos indicaron que la ampliación del escudo antimisiles podría dar lugar a su retiro.
Moscú subrayó en reiteradas ocasiones que el aumento del potencial militar de la OTAN, la expansión de sus misiones globales y de la actividad militar, así como la futura ampliación de la Alianza y el acercamiento de su infraestructura militar a las fronteras rusas, representan una amenaza a la seguridad nacional de Rusia.
Rusia y EEUU firmaron el Tratado START III en abril de 2010 en Praga en sustitución de los dos acuerdos anteriores, el START I de 1991 y el Tratado de Reducciones de Armas Ofensivas Estratégicas de 2002.
El START III, que entró en vigor en febrero de 2011, obliga a los dos países a recortar y limitar el número de armas estratégicas.
Además las partes están obligadas a intercambiar cada seis meses datos sobre sus armas estratégicas.