Este acuerdo de reestructuración fue firmado ayer por el ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, en presencia del vicepresidente cubano, Ricardo Cabrisas Ruiz, en Madrid.
Se trata de una deuda histórica, que la isla arrastraba desde hace décadas.
Además de este "regalo", el Gobierno español y cubano acordaron otro programa adicional de conversión de deuda por un total de 375 millones de euros, destinados a financiar proyectos de desarrollo económico y social con participación de empresas españolas.
Este acuerdo es un precedente ante la próxima visita a Cuba del canciller español, José Manuel García-Margallo, los próximos días 14, 15 y 16 de mayo.
Este acuerdo sitúa a España en un "lugar privilegiado" en la carrera internacional tras la apertura económica de la isla, según publica el diario El Mundo.