“Aplaudimos la decisión de la corte de distrito de La Haya sobre la supresión de la decisión del Tribunal de La Haya que ordena pagar 50.000 millones de dólares a los antiguos accionistas de Yukos”, dijo.
Recordó que Rusia insistió desde el principio del proceso en que el Tribunal no había tomado en cuenta aspectos importantes del derecho internacional.
"Nuestro argumento principal era y es el hecho de que Rusia no ratificó Carta de la Energía, en base de la cual los antiguos accionistas de Yukos, o más precisamente tres compañías 'offshore', presentaron la demanda contra Rusia", indicó.
En 2003, las autoridades rusas imputaron evasión fiscal y otros delitos económicos a los dueños de la entonces mayor petrolera privada del país, entre ellos el magnate Mijaíl Jodorkovski.
Posteriormente Yukos se declaró en quiebra y sus activos fueron adquiridos por la empresa pública Rosneft.