"La demanda fue por más de 60.000 millones; es la demanda más grande de la historia argentina para un bono y está posiblemente entre más de las 20 grandes de la historia; para un país que está en 'default' es increíble; es pasar de la oscuridad a la posibilidad de volver a conectarnos con el mundo", dijo Prat-Gay en una rueda de prensa junto al jefe de Gabinete, Marcos Peña.
El Gobierno argentino salió a vender bonos del Tesoro para reunir unos 15.000 dólares que le permitan pagar esta semana a los acreedores beneficiados con un fallo judicial del juez estadounidense Thomas Griesa y terminar con el cese de pagos en el que Argentina incurrió en 2001.
Para Prat-Gay, ese paso "va a significar líneas de crédito para el sector privado y que las provincias puedan volver al mercado" en busca de financiamiento.
Peña, por su parte, explicó que altos cargos argentinos realizaron una recorrida de 10 días por distintos centros financieros internacionales "convenciendo a los que están afuera y los que están adentro que la Argentina, que estamos transitando un nuevo camino".
Reconoció asimismo que el país vive "un momento angustiante", con elevada inflación, subas generalizadas de las tarifas de servicios públicos y despidos masivos, informa la agencia oficial Télam.
El ministro de Finanzas aseveró que con la salida del cese de pagos la economía del país volverá a crecer y se iniciará el camino hacia la "pobreza cero", promesa de campaña del actual presidente Mauricio Macri.