"Espero que no haya decepción (respecto a la frustración por las consultas para la congelación de la extracción), porque no nos habíamos hechos ilusiones ningunas sobre la posibilidad de acordarlo en Doha", señaló el portavoz al responder a la pregunta de si Rosneft está desilusionada por los resultados de este encuentro.
La caída del precio del petróleo del 4% (desde que se abrieron las ventas este lunes) es una prueba de que el mercado acogía con escepticismo la probabilidad de la congelación de la extracción, agregó.
Según Leóntiev, Rusia ocupó una posición correcta en estas negociaciones, mostrando "que está dispuesta a cooperar con los demás actores del mercado, lo que ya es buena señal de por sí".
Se preveía que los miembros de la OPEP y los productores que no integran el cartel centraran las discusiones en la posibilidad de congelar la extracción y así empujar al alza los deprimidos precios internacionales, que cayeron de 115 dólares por barril a mediados de junio de 2014 a poco más de 40 hoy en día.
Se trató del segundo paso en este sentido después de que Arabia Saudí y Rusia, principales productores del crudo del mundo, anunciaran en febrero pasado, junto con Venezuela y Catar, la disposición a mantener la producción de este año al nivel de enero, si otros países se sumaban a la iniciativa.
Los países productores de petróleo retomarán las negociaciones en la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que se celebrará en junio.