El gobierno mexicano ha manifestado además su solidaridad a las familias de los fallecidos, y "hace votos por una pronta recuperación de los heridos y la normalización de las actividades en las poblaciones afectadas".
La embajada de México está en contacto con las autoridades de Ecuador y con sus connacionales en el país andino; que hasta el momento, no tiene registro de que haya mexicanos afectados por esta tragedia.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha dado las gracias "al mundo entero por la solidaridad" y asegura que todo el país se ha movilizado.
El mandatario ha anunciado nuevos reportes del terremoto, e indicó en sus cuentas en redes sociales que Barrio Tarqui de Manta está muy afectado: "Pedernales destruido. Vicepresidente se dirige a Portoviejo".
Correa definió el terremoto grado 7,8 en las escala de Richter, que mide la energía liberada por los movimientos telúricos, como "el más fuerte de las últimas décadas", con epicentro detectado por los sismógrafos a 28 kilómetros de Muisne, localizada a unos 200 km de la capital, y foco a 20,2 km de profundidad.