"Ahora sí, después de dos oportunidades, quienes no asistieron, como ha sucedido en el resto de las 28 entidades, serán dados de baja, estamos hablando de alrededor de 1.200 maestros", dijo Aurelio Nuño, secretario federal de Educación Pública.
Los maestros del estado de Guerrero que no presentaron la llamada Evaluación Educativa, como una forma protesta contra la reforma —que según ellos no considera las condiciones específicas del conflictivo estado con predominio indígena, asolado por la violencia-, serán dados de baja a partir de mayo.
Esa cantidad de maestros despedidos, equivale a casi la cuarta parte de todos los maestros de Guerrero (24 por ciento) en un estado donde la disidencia organizada del magisterio contra la Reforma Educativa, es el enclave más combativo junto con los maestros opositores en los estados de Oaxaca y Michoacán.
"En el estado de Guerrero ha concluido este proceso, correspondiente al ciclo escolar 2015-2016", dijo a periodistas el responsable del gobierno de Enrique Peña, al confirmar los despidos como sanción a la ausencia en las evaluaciones convocadas.