"Creo que las armas pueden y deben ser adquiridas no solo para su uso sino también como factor de contención", dijo.
Agregó que Rusia continuará la cooperación técnico-militar con ambos países y considera que la llegada a la región de nuevos suministradores de armas solo empeorará la situación.
"Si nos imaginamos un momento que Rusia rechaza este papel (de suministrador de armas a esta región), las comprarán a otros y no por eso estas serán menos mortales", explicó.
Esta circunstancia influirá negativamente en el equilibrio de las fuerzas en la zona del conflicto de Nagorno Karabaj porque Rusia ya conoce las necesidades de las partes, afirmó.


