"La ruta del dinero K", reitera en sus titulares el diario oficialista Clarín, en referencia a la investigación sobre Báez, mientras el opositor Página/12 pone en su portada la palabra "Panamacri", en alusión al escándalo que rodea al presidente por aparecer en los llamados papeles de Panamá.
El fiscal federal argentino Federico Delgado imputó el jueves a Macri por figurar en esos documentos filtrados a la prensa como director de una sociedad opaca en las islas Bahamas.
Macri anunció en rueda de prensa que se presentará a la justicia civil este viernes para conocer a fondo la imputación.
"Me presentaré a la justicia civil para pedir una declaración de certeza con toda la información para que un juez certifique que lo que he dicho es verdad, y no ha habido una omisión maliciosa", afirmó, y añadió que estaba a disposición "de cualquier otro juez que requiera información".
También este viernes, el juez federal Sebastián Casanello tomará declaración a un periodista argentino que investiga los papeles de Panamá y a una abogada en el marco de la causa contra Macri.
Otro caso salpica a kirchneristas
Otro caso que acapara la atención en el país es la detención del empresario argentino Lázaro Báez por orden de Casanello, bajo sospecha de ser responsable de delitos de lavado de dinero y desvío de fondos.
Báez, dueño de la empresa Austral Construcciones, fue el principal adjudicatario de obras públicas en la provincia argentina de Santa Cruz (sur), durante los gobiernos de los expresidentes Néstor Kirchner (2003-2007), oriundo y exgobernador de esa jurisdicción, y Cristina Fernández (2007-2015).
Por otro lado, el sábado fue detenido Ricardo Jaime, quien fuera secretario de Transporte entre 2003 y 2009, en una causa que investiga compras multimillonarias de material ferroviario a España y Portugal que resultó inutilizable.
En sus declaraciones a la justicia, Jaime responsabilizó de la compra al entonces secretario de Planificación, Julio de Vido, y al expresidente Kirchner, fallecido en 2010.
Jaime ya se encontraba procesado por presunto enriquecimiento ilícito.
Mientras, la propia expresidenta Fernández debe comparecer la semana próxima en otra investigación por supuesta defraudación al Estado en la compra de dólar a futuro dispuesta por el Banco Central.