LA PAZ (Sputnik) — A la cita asistieron más de medio centenar de personalidades del cuerpo diplomático en Bolivia y de oficinas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Organización de Estados Americanos (OEA), Corporación Andina de Fomento (CAF), Banco Mundial (BM) y Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
"Se hizo presente los argumentos que muestran que esta demanda (por las aguas del Silala) no es artificial o artificiosa como sugirieron (algunas autoridades chilenas), sino que hay argumentos de peso, contundentes, históricos, jurídicos y técnicos", declaró el viceministro de Relaciones Exteriores, Juan Carlos Alurralde, citado por la Agencia Boliviana de Informaciones (ABI), al término de la reunión.
"No es un río internacional", afirmó Alurralde que argumentó el derecho que le asiste a Bolivia de acudir a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para hacer respetar la propiedad boliviana sobre las aguas del Silala.
Reiteró que el Gobierno de Evo Morales busca resolver esta controversia en "paz y armonía" con su par de Chile.
Mientras el Gobierno de Chile sostiene que las aguas del Silala son parte de un río internacional y que su uso en territorio chileno es legal y no vulnera los derechos de Bolivia, el Gobierno de Morales reclama la propiedad de dichas aguas que nacen de manantiales de las faldas del cerro Quetena ubicado en el sur del departamento de Potosí.