Según informa Ria Novosti, los científicos rusos de la Universidad Federal del Noreste M. K. Ammosov investigaron los restos del primer can y ahora estudian al segundo.
"El sólido meninge muy bien conservado repite el relieve interior del cráneo. Durante la autopsia, notamos que todo el complejo junto con el meninge, cuyo peso es de tan solo 11 gramos, llenaba aproximadamente el 70% del espacio del cráneo", comentó Serguéi Fédorov, uno de los investigadores.
Yuka era, hasta ahora, el único animal hallado en el mundo con el cerebro bien conservado.
Según explica Fedorov los científicos planean desarrollar un programa especial para el estudio posterior del cerebro del can en el que participarán centros de investigación tanto rusos como extranjeros.
“En el mundo no hay más hallazgos de los predadores del pleistoceno que se conserven desde la cúspide de la nariz hasta el rabo”, señaló el científico.