La exportación de frutas es uno de los principales rubros del comercio argentino-ruso. Jorge Cervi, presidente de Mario Cervi e Hijos, productores y exportadores de manzanas y peras de las provincias de Río Negro y Neuquén, señaló a Sputnik que "el comercio con Rusia comenzó hace veinte años con peras y manzanas y ya es un comercio habitual. 22% del destino total de las peras y entre un 12 y un 15% de la producción de manzanas se dirige a Rusia".
Para el exportador argentino, la devaluación del rublo jugó en contra, porque el peso argentino estaba sobrevaluado, lo que impidió aprovechar a fondo la oportunidad de exportar a Rusia. Pero tras la devaluación que ha sufrido la moneda argentina en los últimos meses desde la asunción del gobierno de Mauricio Macri en diciembre de 2015, las esperanzas son que se logre revertir la situación y aumentar el comercio.
"Con las nuevas condiciones de mercado en Argentina a partir del gobierno de Mauricio Macri, esperamos seguir desarrollando ese comercio.Tenemos especialidades de granos, como maíz de popcorn, girasol confitero, alubias, productos que el mercado ruso consume pero que importa de países vecinos como China o Bulgaria. El sector frutícola de nuestro grupo tiene las mejores condiciones de competitividad. Las ciruelas secas, por ejemplo, solo se producen en Estados Unidos y Suramérica, lo cual nos da condiciones de competitividad mejores que otros países", agregó.
"La devaluación en Rusia hizo muy difícil a nuestros clientes poder competir, pero hay que reacomodar las piezas de la economía. En la Argentina, la ecuación se ha modificado, no sólo por la devaluación sino por las medidas del gobierno de eliminar las retenciones a las exportaciones agrarias, lo cual va a ser beneficioso. También tenemos expectativas para desarrollar el mercado de genética en Rusia".
Manuel García Solá, del Centro de Genética del Litoral, de la provincia del Chaco, tiene un interés muy firme en "proveer a Rusia del rico patrimonio genético ganadero argentino en las razas utilizadas en Rusia, de origen británico, como la Holstein".
"Los invitamos a que se animen a construir empresas junto con nosotros", señaló, destacando las necesidades alimentarias de Rusia y las posibilidades en la Argentina. Las empresas que representa García Solar producen vacunas biológicas, semen y embriones congelados y realizan proyectos de inversiones financieras agropecuarias. "Tenemos el know how y la capacidad de producir alimentos para abastecer ese enorme mercado y a todos sus aliados políticos y comerciales. Ahora estamos haciendo un fondo de inversión internacional para la producción de vientres. El negocio ganadero no tiene techo, el ascenso de las clases medias es un fenómeno mundial, lo cual lo cual eleva las condiciones nutricionales y la necesidad de proteína roja. Esperamos que haya interesados en Rusia que se sumen a los inversores norteamericanos, brasileños y argentinos que nos están acompañando en este negocio".