"Estoy en la pista de aterrizaje junto con miles de otros pasajeros como yo. No sabemos nada, la conexión móvil funciona solo en una dirección —solo se puede recibir llamadas-. Me entero de las noticias por mis amigos. Fue en el edificio del aeropuerto, estuve muy cerca, a unos 30-40 metros, y después el servicio de seguridad nos dio la señal ‘run' (de correr) y todos arrancamos en la dirección indicada por los empleados de seguridad".
"Durante la evacuación nos confiscaron el equipaje que no había sido chequeado aún, como fue, por ejemplo, mi caso, ya que todavía no había pasado el 'security check'. A los que le registraron el equipaje, están con sus maletas. La evacuación está avanzando, y la cantidad de personas va disminuyendo, aunque desconozco el motivo, porque evito la multitud, tal como me lo enseñaron", concluyó.
Dos explosiones se registraron este martes a las 08.00 hora local en el aeropuerto de Bruselas y más tarde uno en el metro de la capital belga. Según las últimas estimaciones, fallecieron 28 personas. El Estado Islámico (Daesh en árabe, organización extremista proscrita en Rusia y en otros países) es el principal sospechoso de ser el autor de los atentados, informa RIA Nóvosti. Los ataques en la capital belga pueden haber sido causados por un terrorista suicida, informó el fiscal federal de Belgica, Frederic Van Leeuw.